Cuando las luces se apagaron y las notas de In Chains comenzaron a sonar en la noche bogotana, el público presente en el parque Simón Bolívar entró en la noche del sábado en comunión con una de las bandas más impactantes del pop rock mundial: la mítica Depeche Mode.La canción, que hace parte de su disco Sounds Of The Universe, impactó con sus notas electrónicas fuertes, lo que auguraba una noche brillante.
Era la primera vez que el grupo visitaba a Colombia y, por eso, entregó todo lo mejor de sus casi 30 años de carrera. Canciones como Personal Jesus o Enjoy The Silence cautivaron y trajeron recuerdos de los buenos tiempos del llamado synthpop y la new wave. Fueron casi dos horas de concierto de la popular grupación británica, que tocó hasta pasadas las 10 de la noche debido al extenso repertorio de éxitos.
Unas 20.000 personas se veían en el escenario plaza del Simón Bolívar. Las localidades, dispuestas para quedar más cerca de la tarima, gracias a una tecnología que retiró la consola de mezclas del centro, no se llenaron. Esto permitió que el ingreso, que comenzó a las 4 p.m., fuera muy organizado. No obstante, las filas no fueron tan largas como las de los destacados conciertos de Kiss y Iron Maiden. Sin embargo, el ambiente fue de emoción. Se trataba de un público, en su mayoría con más de 35 años, que volvía a los sonidos de los años 80 y 90, con álbumes como Music for the Masses. Antes de la salida de Depeche Mode, estuvo la agrupación colombiana Angele Phase, que salió a la tarima a las 8:00 p.m.
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